Dálmine se fue triste: lo embocó el 10 de Bera y se quedó sin la punta.
Jamás se imaginaría Dálmine que en Berisso le iban a llenar el bombo. O mejor dicho el Pombo. Porque el volante de Bera amargó al Viola de Campana, que si bien venía de una derrota ante El Porvenir, seguía en la cima con la UAI, hoy único líder. El Naranja de Zerillo fue más en la primera parte cuando las combinaciones entre Salomone y Pombo generaron las jugadas más peligrosas de esa primera etapa, inclusive al minuto 41 el árbitro Iglesias le anuló un gol a los locales convertido por Salomone apoyándose en su juez de línea, quien había levantado la bandera.
En el ST salió más decidida la visita y encontró una buena actuación de César Gonzalez y generó una gran salvada de Iribarne sobre la línea. De a poco el Viola fue conformándose y las ambiciones de un Naranja que quiere meterse en el Reducido lo empujaron hacia su arco. Cuando quedaba poco, Nahuel Pombo la controló solo y fusiló a Gómez para ilusionar a todo Bera, con subir.
